Suegros, no cometan estos errores
Serie: La familia política
¿Ha cometido usted algún error con su familia política, del cual se arrepiente? Todos cometemos errores, porque no hay justo ni aún uno, se nos recuerda en Romanos 3:10. Nadie es perfecto, todos fallamos. Los suegros y las suegras cometen errores y en algunos casos, se trata de horrores. Pero acá no vamos a juzgar, vamos a aconsejar. Aun cuando se sabe que todas las familias pasan por momentos negativos, momentos neutros y momentos positivos; como Pastor y Orientador Familiar he comprobado que tanto fuera como dentro de las iglesias cristianas de nuestros días, se observa a muchos matrimonios y familias que no funcionan de acuerdo al plan de Dios, debido a los errores que cometen y que se pueden evitar. David reflexiona y pregunta en Salmos 19:12: “¿Quién podrá entender sus propios errores? Líbrame de los que me son ocultos”. Quiera Dios que nosotros entendamos cuáles son nuestros errores, los enmendemos y sobre todo, los evitemos. En el caso de los suegros, algunos errores que deben evitar son los siguientes: Suegras no compitan con su nuera por el amor de su hijo. Suegros no compitan con su yerno por el amor de su hija. Recuerde que para una persona casada, su cónyuge es prioridad. No se interfieran ni en los problemas ni en las decisiones de sus hijos biológico y legal. Si les piden un consejo deben ofrecerlo, pero no hagan el papel de jueces. No critiquen públicamente al yerno o a la nuera, diciendo por ejemplo que el yerno debiera buscar un mejor trabajo o que a la nuera le quedó mal la comida. No den por sentado que su hijo o hija nunca se equivoca o que no es culpable de haber provocado algún conflicto de pareja. No sean cómplices de las faltas de su hijo o hija, ni formen dos bandos: ustedes y su hijo o hija y su yerno o nuera con sus consuegros, lo cual dividirá más a la familia.
Siga los anteriores consejos prácticos, ya que después de Dios, la familia es prioridad.