“¿Cómo te sientes?”
Serie: Frases que debe decir a su cónyuge
¿Cuántas veces se ha sentido usted alegre, animado, satisfecho, amado, respetado, seguro, decidido? Pero también, ¿cuántas veces se ha sentido frustrado, desanimado, triste, preocupado, temeroso, ofendido y enojado? Obviamente, como seres humanos dotados de sentimientos, experimentamos una enorme variedad de emociones. En ese sentido, cuando el cónyuge pregunta: ¿Cómo te sientes? Significa que se preocupa por el bienestar de su pareja.
En 1 Pedro 3:8,9 se nos recomienda: “Finalmente, sed todos de un mismo sentir, compasivos, amándoos fraternalmente, misericordiosos, amigables; no devolviendo mal por mal, ni maldición por maldición, sino por el contrario, bendiciendo, sabiendo que fuisteis llamados para que heredaseis bendición”. El Nuevo Testamento hace un llamado a los cristianos a ser de un mismo sentir. Es decir, estar en sintonía o en acuerdo para que no haya discrepancias. Eso solo es posible, cuando hay amor, misericordia y cuando se busca edificar o bendecir a los demás.
Cuando dos grupos de creyentes o dos creyentes particulares tenían diferencias muy marcadas y vivían en constantes conflictos, se les hacía el mismo llamado. Así por ejemplo, en Filipenses 4:2 Pablo pide: “Ruego a Evodia y a Síntique, que sean de un mismo sentir en el Señor”. Estas dos hermanas en la fe, habían servido juntas al Señor, pero tenían grandes diferencias y se habían peleado. Lo que Pablo les pide es que se reconcilien o que sean del mismo sentir. En la vida matrimonial, también debemos procurar ser de un mismo sentir.
Por eso, le doy un consejo práctico: Pregúntele a su cónyuge cómo se siente sobre algún asunto en particular. Si se siente desanimado, levántele el ánimo. Si se siente triste por algún tipo de pérdida, consuélele e identifíquese con él o ella. Si se siente alegre por algún triunfo obtenido, celebren juntos. No olvide que la empatía es uno de los secretos de las parejas saludables.